Los dolores de espalda aparecen y desaparecen de repente sin darnos cuenta, hasta que gradualmente se vuelven crónicos, es decir, aprendemos a vivir con el dolor.

Puede empezar con solo cargar una bolsa del mercado, amarrarse una cinta del zapato, mientras se está sentado frente al escritorio o simplemente al hacer cualquier movimiento incluso lo que menos imaginamos, nuestras emociones, nuestros estados anímicos también nos pueden perjudicar.

Aunque mucha gente busca justificar el porqué de este malestar, en realidad, el dolor puede ocurrir por diferentes factores o hábitos, que se han ido acumulando. La búsqueda por el alivio de este mal, lleva millones de dinero invertidos y al final, los efectos y resultados que se consiguen en una persona, no son los mismos que en otra.

Según estudios hechos, estos problemas pueden prevenirse manteniéndose en forma, haciendo ejercicio y cuidando su peso. También ayuda el tener una buena postura al caminar o al sentarse, aprender nuevas técnicas para levantar objetos pesados y escoger el zapato adecuado, que fortalezca el paso y le de estabilidad a la espalda e incluso estar relajado y sin estrés.

Cuando se practica un deporte incorrectamente, se puede torcer un músculo o tendón, causando gran dolor. El sobre peso, el embarazo o alguna condición congénita como la escoliosis, por ejemplo, ponen presión en la parte baja de la espalda, debilitando los músculos, nervios y las coyunturas.

Existen varias opciones para el tratamiento de esta molestia, además de algunos ejercicios especialmente dirigidos a estirar y a fortalecer los músculos de la espalda, también está la acupuntura y el yoga.

Lamentablemente, lo único que el doctor le recetará para aliviar este dolor son relajantes musculares, antiinflamatorios o alguna inyección para el dolor.

El médico puede ordenar rayos X o métodos más avanzados, para un mejor diagnóstico de la condición. Poner en práctica métodos preventivos y cuidarse, pondrán un granito de arena a su favor, evitando problemas mayores.

Generalmente el dolor de espalda es tratado con ibuprofeno y naproxeno de sodio pues estos medicamentos eliminan la inflamación y alivian el dolor.

Sin embargo, hay otros remedios naturales que también pueden ser útiles.

CÓMO ALIVIAR EL DOLOR DE ESPALDA

Frío y calor:

Envuelva unos cubos de hielo en una toalla y aplique al área afectada por 20 minutos. Aplíquelo varias veces durante 48 horas. Después cambie al calor. Moje una toalla con agua bien caliente, exprima y dóblela para aplicar sobre la espalda. Cubra la toalla y encima póngale una cobija eléctrica en nivel medio para conservar el calor. Déjelo por 20 minutos.

Importante – Nunca aplique calor cuando el dolor de espalda es agudo o causado por una lesión ya que el calor puede aumentar la inflamación. Solo se debe aplicar calor cuando el dolor de espalda es crónico.

Plantas medicinales:

El romero y vinagre es otra de las alternativas naturales ideales para aliviar el dolor de espalda. Usada popularmente en la cocina cuenta con propiedades antiinflamatorias muy efectivas cuando se emplea de forma tópica.

Son varias las maneras en las que puedes usarlo para aliviar tus molestias:

Masajeando la zona afectada con aceite de romero que puedes preparar en casa. Puedes aplicar este tratamiento dos veces al día.

Preparando un baño de agua caliente con romero fresco. Deja reposar las hierbas en el agua durante al menos 5 minutos y luego métete en la bañera. Este remedio casero te ayudará además a disminuir el estrés, lo que también fomentará el alivio.

Con compresas de vinagre y romero. Hierve en un litro de agua 1/4 de vinagre y media taza de romero durante 5 minutos. Deja reposar y cuando esté a una temperatura adecuada para entrar en contacto con tu piel, moja un paño y aplica en la zona afectada por al menos 10 minutos. Puedes repetir tres veces al día.

Infusiones de Salvia también es muy beneficiosa, toma 3 infusiones al día.

Ejercicios para relajar la espalda:

*Ponga una pelota entre su espalda y la pared. Flexionando las rodillas para arriba y abajo, haga rodar la pelota. Repita hasta que sienta la relajación en la espalda.

*Acostado en el suelo, tómese una rodilla y aprete el muslo hacia el pecho. Mantenga esta posición unos segundos y repita con la otra pierna.

Masaje:

Si tiene a alguien que le pueda dar un masaje, éste es otro excelente remedio para aliviar el dolor de espalda crónico. Para hacerlo más efectivo se puede usar una de esas cremas comerciales mentoladas que venden especiales para aliviar el dolor de espalda.  O puede hacer su propio aceite masajeador mezclando una cucharada de aceite de coco con unas tres o cuatro gotas de aceite esencial de menta.

Puede acudir a centros especializados en este tema, que le ayudaran mucho a corregir su problema y averiguar en que puntos son los que realmente le causan estos dolores y trabajar en ello.

*Masaje con pelotas de tenis

Llene un calcetín con pelotas de tenis y pídale a alguien de la casa que le de un masaje en la espalda rodando el calcetín con las pelotas de arriba hacia abajo.