ORIENTACIÓN FAMILIAR – LOS NIÑ@S Y ADOLESCENTES SON NUESTRA RESPONSABILIDAD

Nosotros los adultos somos responsables de su futuro y ellos del nuestro

Orientación familiar. Niños y adolescentes nuestra responsabilidad. Si es nuestra responsabilidad una llamada tanto a padres, madres, familiares y a todos aquellos seres humanos que sabemos que estamos aquí para poder protegerlos y ayudarlos. Estas nuevas generaciones que han llegado y estan llegando vienen con una nueva conciencia para la humanidad, que no tiene nada que ver con nuestro pasado los niñ@s de la guerra, donde el dolor, la represión y la pena fue el principal alimento.

Nosotros los adultos somos responsables de su futuro y ellos del nuestro, por desgracia esta sociedad que hemos creado de la cual todos somos responsables no van de acuerdo con sus valores interiores. Esto provoca que muchos de ellos son catalogados de déficit de atención entre otros desequilibrios sobre todo de salud tanto físicos como emocionales. Otros son arrastrados por una sociedad con unas metas donde el éxito material es lo principal sin tener en cuenta muchos otros valores más importantes, donde tarde o temprano les llevara a la frustración y por lo tanto al vacío.

El trabajo de los padres y en especial la familia es fundamental

El trabajo de los padres y en especial la familia es fundamental ya que en ellos están manifestando dichos traumas, que todavía no se han podido liberar y continúan almacenados en nuestras memorias ancestrales llevándonos a hábitos de conducta destructivos y con ello la perdida de los valores humanos y la salud.

Estamos pasando por unas circunstancias y reacciones de todo tipo desde hace ya un tiempo no pudiendo ya ignorar lo que estamos experimentando, donde cada vez observamos que dichas reacciones se nos estan yendo de las manos creyendo que no podemos hacer nada para remediarlo, buscando soluciones muchas veces en tapar el síntoma sin tener en cuenta el origen de dicha causa.

Durante muchos años hemos estado callando al cuerpo

Durante muchos años hemos estado callando al cuerpo y con ello la oportunidad de cambiar estos hábitos de conducta que lo estaban desequilibrando, dicha ignorancia nos está llevando en estos momentos a muchas enfermedades degenerativas, intolerancias alimentarias y desequilibrios psicoemocionales donde nuestros hij@s son el fruto de ello.

Responsabilizamos a políticos, educadores o a la misma sociedad que nos sigue esclavizando a través del miedo y la inseguridad, creyendo que lo que sucede en nuestras circunstancias externas es el problema, tratando de buscar culpables o soluciones en los demás.

Estos traumas ocultos están llevando al ser humano a un vacío existencial que cada vez, nos está afectando en nuestros hábitos de conducta mucho más donde nuestros hij@s son el fruto de ello.

A pesar de tantas reacciones no dejan de ser una oportunidad para mirar dentro de uno mismo y preguntarnos qué puedo hacer yo para cambiar y mejorar mis propias circunstancias y asi aportar algo bueno a esta humanidad.

Estamos en un tiempo donde el conocimiento y la responsabilidad es fundamental para no destruir lo más importante que es la salud, las relaciones humanas entre ellas las familiares y el respeto a la Madre Tierra hay que despertar esos valores internos que tanto necesitamos en esta sociedad y por lo tanto la Humanidad.

Mi experiencia personal y profesional me ha permitido descubrir que soy algo más que un número en esta sociedad que tiene que producir y hacer más ricos a los ricos. Fui un fruto de unos padres que vivieron el hambre y la falta de libertad como muchos otros, durante mi infancia experimente el dolor del alma que es ver como mis pilares más importantes no supieron darse cariño y amor, eso me marco de tal manera que en mi adolescencia entre en la anorexia y poco después en la bulimia durante más de 22 años.

Me case y conseguí un nivel material confortable pero yo seguía con el mismo problema hasta que nació mi hijo y me dijeron que tenía un síndrome de autismo, trate de buscar ayuda y así lo hice sin ver muchos cambios ni en él, ni en mí.

Poco después llegó sin yo buscarlo un taller de reflexología podal y ese fue el hilo que me abrió un mundo desconocido para mí el conocimiento de mi propio cuerpo a través de la medicina naturaleza.

La importancia de tratar a la madre para ayudar a los hij@s

En mi trayectoria profesión conocí a un profesor Alemán Peter Mandel unos cursos de Cromo puntura esta escuela se llama Medicina Esogetica, en uno de sus seminarios nos habló de la importancia de tratar a la madre para ayudar a los hij@s, para mí fue decisiva esa frase “cuando trates a un niñ@ trata a la madre”, esa respuesta para mí fue una oportunidad, una pequeña luz se encendió en mi interior y la necesidad de saber cómo yo podía ayudar a mi propio hijo, aunque tuve que empezar por ayudarme primero a mí misma

En este camino descubrir el porqué de mi desequilibrio y la de mi hijo, poco a poco me tuve que enfrentar a mis propios miedos, frustraciones y por lo tanto a ese vacío existencial que ocultaba la pena de unos padres que no conocieron el amor sino el miedo, con el tiempo llegaron otras experiencias profesionales y personales, todo ello me ha permitido llegar hasta aquí y mi experiencia me ha enseñado que todos podemos tener la misma oportunidad, por ello me veo en la responsabilidad de compartir con todos aquellos que lo necesiten mi propia experiencia y decir que si yo he podido los demás también.

Es necesario recorrer un camino de conocimiento y experiencia

Este camino de conocimiento y experiencia donde la perseverancia y la dedicación me permitió superación de mi misma y por lo tanto el poder ayudar a mi hijo o mejor dicho tambien a mi hija. Doy gracias a Dios esta oportunidad de poder ver como mi hijo se vale por sí mismo y no solo eso tambien es responsable ahora de su propio camino evolutivo al igual que mi hija.

Durante todo el recorrido profesional he podido experimentar el trabajo de muchas madres que han comprendido lo mismo y han visto la importancia de vivir esta superación y asi poder liberar a sus propios hij@s de sus propias frustraciones y traumas han tenido la oportunidad de cambiar la ignorancia en conocimiento y responsabilidad.